El término arte efímero se refiere como su propio nombre indica, a la brevedad en el tiempo de una obra, a la escasa permanencia del objeto en su vida. Se trata de algo tan fugaz que en la mayoría de los casos es casi imposible conservarlo de no ser con la ayuda de medios como la fotografía o el vídeo.
Hay muchas disciplinas o especialidades artísticas que se pueden incluir en esta definición de Arte Efímero. Aquí podríamos incluir: representaciones de danza, creaciones de peluquería o perfumería, la moda, la pirotecnia o la gastronomía sin dejar de lado las instalaciones que hoy en día están por todas partes. El arte efímero ha existido siempre, desde mucho antes de lo que podamos imaginar, y convive con nosotros sin que nos demos apenas cuenta.
La disciplina, incluida en el Arte Efímero, que hoy nos ocupa es el body paint, body art, o si utilizáramos una expresión en castellano diríamos arte de los cuerpos pintados.
Nos alejamos hasta los orígenes del hombre, hasta la prehistoria, para poder encontrar las primeras manifestaciones de este arte. En aquellos tiempos, los hombres primitivos utilizaron pigmentos naturales, carbón, sangre y otros materiales para decorar sus cuerpos con distintos fines tales como mostrar su belleza mediante el engalanamiento, mostrar distintas identidades o grupos sociales, definir una posición ante un ritual o demostrar la pertenencia a un clan determinado.
La pintura corporal permanece, hoy en día, en multitud de grupos tribales repartidas por todo el mundo por ejemplo en las islas del Océano Pacífico, varias zonas en África, algunas regiones de Australia, India y Sudamérica. Pero el body painting ha llegado a nuestros días transformado en una disciplina lúdica y decorativa que tiene al cuerpo humano como protagonista, pintándolo como algo único, llenándolo de creatividad y de insólita belleza como si de un lienzo se tratase.
La temática en el body painting es tan extensa como la imaginación de cada artista, no existe una temática determinada aunque es muy recurrente el tema fantástico plagado de criaturas imposibles de colores inverosímiles. Otro recurso muy utilizado es reproducir prendas de vestir para que se produzca el trampantojo de que la persona pintada no está verdaderamente desnuda.
Una sesión de body paint suele durar varias horas dependiendo del estilo del pintor y de la complejidad del dibujo, se pueden tardar más de diez horas en pintar sobre la totalidad de los casi cuatro metros cuadrados de superficie que ocupa la piel del cuerpo humano, un esfuerzo titánico para el poco tiempo que va a durar la obra.
Parte del éxito del body painting hoy en día reside en que este tipo de decoración del cuerpo permite mostrarlo desnudo sin quebrantar las normas del pudor, pudiéndose mostrar cuerpos desnudos en público sin herir la susceptibilidad de los espectadores. En muchos lugares podemos observar grandiosas manifestaciones de body painting durante el carnaval.
En la actualidad hay al menos dos festivales importantes de Body Paint donde se reúnen grandes artistas, estos son el “World Body Painting Festival” en Seeboden (Austria) y el “International Body Painting Contest” en Bruselas (Bélgica).
Imágenes del Festival de Seeboden y de Fotos del Mundo .